• En cifras: durante el primer semestre del año la COPE tuvo un Ebitda de 3,5 millones de euros.
  • Carlos Herrera cobra tres millones durante esos seis meses.
  • Y sin contar el porcentaje de publicidad.
  • Y esto, en una empresa que ha sufrido un fortísimo recorte de plantilla, de fuerza, de trabajo y de salarios.
  • Al parecer, el de Herrera es el salario digno de la  Doctrina Social de la Iglesia (DSI).
  • Pero Fernando Giménez Barriocanal continúa repitiendo la mentira de que la COPE no le cuesta dinero a la Iglesia católica.
  • Además, él no rinde cuentas a nadie: los obispos no le llaman. Y si les llama no se pone.
  • En resumen, Herrera no ha salvado a la COPE pero sí la Presidencia de Barriocanal.
Los 700 empleados de la cadena COPE trabajan para pagarle el salario a Carlos Herrera, al que el presidente de la cadena, Fernando Giménez Barriocanal (ambos en la imagen), considera el salvador de la cadena de emisoras de los obispos. Hombre, lo que está claro es que si Carlos Herrera, el teólogo católico de los juguetitos sexuales, se dedicara a hacer una radio católica habría que callarse ante la desastrosa gestión económica del presidente Barriocanal, pero no parece ser el caso. El asunto es que durante el primer semestre del ejercicio el resultado de explotación (Ebitda) de COPE fue de 3,5 millones de euros, y eso tras su mejora respecto a 2015. Pues bien, con el dinero de la Iglesia Barriocanal pagará a Carlos Herrera, durante ese mismo periodo, 3 millones de euros. Y eso sin contar el porcentaje que se lleva de publicidad, no sólo en la que se emite en su espacio sino aún más, en términos relativos, en la publicidad en que él mismo participa, dentro de esa desgraciada moda de que el periodista informa y hace propaganda, todo a un tiempo y en aras de su imparcialidad. En definitiva, que los aproximadamente 700 trabajadores de la COPE trabajan para pagarle el sueldo a Carlos Herrera. Sueldo, por otra parte, muy acorde con la Doctrina Social de la Iglesia y su paradigma del salario digno. En efecto es un salario de lo más digno. De hecho hizo que la rúbrica (ver Memoria COPE) de los servicios exteriores de la COPE se disparará un 10% en 2015. En 2016, más. No es de extrañar que en Planeta se alegran mucho de la marcha de Carlos Herrera, que allí cobraba la mitad: ahora Onda Cero es la tercera y la COPE segunda, pero Onda Cero, ahora, tiene una balance saneado, mientras la COPE… Total, pagamos los católicos… La plantilla de la COPE brama pero calla: ha sufrido una reducción de elementos, de salarios y de fuerza de trabajo que aún no ha recuperado. Y si lo medimos frente a beneficio… entonces sólo hace falta recordar que la COPE sigue en pérdidas y que el desastre Barriocanal promete grandes beneficios para este año… que nadie sabe de dónde van a salir. En el entretanto, Giménez Barriocanal mantiene el artificio de que la COPE no le cuesta dinero a la Iglesia. Ya demostramos en Hispanidad que es mentira. Las pérdidas acumuladas por COPE durante el largo quinquenio de gestión de Fernando Giménez -16 millones de euros-. No se han subsanado con ampliaciones de capital pero sí depreciado hasta la cuarta parte, el patrimonio de la iglesia. Además, sí tiene deuda. No es deuda bancaria sino algo peor: es deuda con Vicente Boluda. Por tanto, cuando el vicesecretario general de la Conferencia Episcopal asegura que la COPE no le cuesta un euro a la Conferencia Episcopal el polígrafo dice… ¡que miente! En resumen, Barriocanal, el que no atiende a ningún obispo y no le hace ni caso si alguna vez lo hicieran (a fin de cuentas, sólo son los propietarios) está dispuesto a convertirse en un señor de la prensa… con el dinero de los curas. En otras palabras, Herrera no ha salvado a la COPE (a ésta más bien le ha hundido) pero sí ha salvado la Presidencia de Barriocanal… a costa del patrimonio de la Iglesia. Y esto es lo importante, ¿verdad? Eulogio López eulogio@hispanidad.com