El actor Willy Toledo ha salido este jueves en libertad tras prestar declaración en el juzgado de instrucción número 11 de Madrid por un presunto delito de ofensa a los sentimientos religiosos. Al salir del juzgado, el actor ha asegurado que no cree haber "cometido ningún delito" y que, al forzar su detención, estaba haciendo "un acto de desobediencia civil", informa El País.

Toledo ha llegado al juzgado escoltado por la policía pero sin esposas. Antes de entrar a la sala para su declaración, Toledo ha gritado, visiblemente agitado, "tendría usted que desaparecer de la faz de la tierra", en referencia al juez o uno de los abogados, las únicas personas que lo acompañaban. Al salir, decenas de espontáneos lo han recibido al grito de "me cago en Dios" y con fuertes aplausos.

"Estoy haciendo lo que tengo que hacer, que es llamar la atención, porque es vergonzoso que haya todavía cinco artículos en el código penal relativos a los sentimientos religiosos", ha asegurado Toledo al salir. El artista ha aclarado que no sabe si se llegará a celebrar el juicio pero que el continuará "hasta el final" en apoyo de toda persona que esté siendo perseguida por lo que piensa, incluyendo a los "compañeros de Alsasua”.

La Asociación Española de Abogados Cristianos (AEAC) presentó una denuncia contra el actor ante la Fiscalía al considerar que sus declaraciones podían constituir un delito contra los sentimientos religiosos

El pasado 4 de septiembre el juez instructor del caso ordenó la detención de Toledo para asegurar su comparecencia en los juzgados el 13 de septiembre ya que el actor había anunciado en Facebook que no se presentaría ante el juez en la cita del 13 de septiembre y que llevaría este acto de desobediencia “hasta las últimas consecuencias”, recuerda Aciprensa.

El 5 de julio de 2017, el actor escribió en su perfil de Facebook un mensaje en relación a la detención de tres activistas de Femen que iban a ser juzgadas por “presuntamente organizar la Procesión del Coño Insumiso de Sevilla. Según la energúmena de la jueza, dicha procesión constituye un escarnio al dogma de la santidad y virginidad de la Virgen María". “Yo me cago en Dios y me sobra mierda para cagarme en el dogma de la santidad y virginidad de la Virgen María”, afirmó.

En marzo de 2018, la Asociación Española de Abogados Cristianos (AEAC) presentó una denuncia contra el actor ante la Fiscalía al considerar que sus declaraciones podían constituir un delito contra los sentimientos religiosos