El 'procés' separatista catalán agoniza. El juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena ha procesado por delito de rebelión a 13 de los 28 investigados por su participación en el denominado 'procés' para la independencia de Cataluña, incluidos el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont, huido en Bruselas; el exvicepresidente Oriol Junqueras, en prisión preventiva;  el actual candidato a la investidura, Jordi Turull, y la secretaria general de ERC, Marta Rovira, que este mismo viernes ha huido de España, informa RTVE. En otras palabras, todos los localizables ingresarán en prisión.

También están encausados por rebelión- penado con hasta 25 años de cárcel- los exconsellers Joaquím Forn, en prisión preventiva, Raul Römeva, Josep Rull, Dolors Bassa, Clara Ponsatí y Antoni Comín (los dos últimos huidos); además de la expresidenta del Parlament Carme Forcadell; el exlíder de la ANC y excandidato a president, Jordi Sànchez; y el presidente de Òmnium, Jordi Cuixart.

En otro grupo, el juez ha procesado por delitos de malversación de dinero público y de desobediencia a otros cinco ex consejeros de la Generalitat: Meritxell Borrás, Lluís Puig, Carles Mundó, Santi Vila y Meritxell Serret.

Por el delito de malversación, Llarena ha señalado también a Puigdemont, Junqueras y a los siete ex consejeros procesados por rebelión. En cuanto a los antiguos miembros de la Mesa del Parlament, Llarena ha procesado por un delito de desobediencia a Lluís Maria Corominas, Luís Guinó, Anna Isabel Simó, Ramona Barrufet y Joan Josep Nuet.

El magistrado ha incluido también en el auto a la ex presidenta del Grupo Parlamentario de la CUP, Mireia Boya, así como a la ex portavoz del Grupo, Anna Gabriel, por delito de desobediencia.

En total y hasta la fecha, Llarena ha procesado a 25 de los 28 imputados. Se han quedado fuera de la causa el expresidente de la Generalitat Artur Mas; la coordinadora del PDeCAT, Marta Pascal, y la expresidenta de la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI) Neus Lloveras.

Argumenta el juez en su auto de procesamiento, al que ha tenido acceso RTVE.es, que Puigdemont, Junqueras y Forn fueron advertidos en la reunión de coordinación policial sobre el referéndum del 1-O del "grave riesgo" de "incidentes violentos" el día de la consulta.

"Conocían la gravedad de la protesta del 20 de septiembre ante la Consejería de Economía y decidieron continuar con el referéndum, llamaron a la población a la movilización e impulsaron un operativo policial autonómico comprometido con que las movilizaciones partidarias de la votación ilegal pudieran enfrentarse con éxito a la fuerza policial del Estado", reza el auto.

Si, como es casi seguro, estos procesados no se ponen a disposición del juez, es muy probable que en un plazo más o menos inmediato Llarena dicte orden de detención internacional contra ellos, tomando como base los autos de procesamiento, algo que ya ha adelantado en alguno de sus escritos.

A todo esto, la diputada y secretaria general de ERC, Marta Rovira, ha huido de España y no se ha presentado ante en Tribunal Supremo para emprender, según ha anunciado en una carta, "un duro camino, el del exilio", ha avanzado TVE Cataluña.

Rovira debía presentarse este viernes ante Pablo Llarena en una vistilla en la que el juez decidía sobre el procesamiento de ella y otros investigados por la causa del proceso independentista en Cataluña. El magistrado ha procesado por rebelión a 13 de los 28 investigados, entre ellos Rovira, Puigdemont, Turull y Junqueras.

"Hoy emprendo un camino duro, un camino que, desgraciadamente, tantos otros que nos preceden han tenido que coger. El camino del exilio", asegura en la misiva.

Rovira afirma que siente una "profunda tristeza por alejarse de la gente que quiere, pero que "mucho más triste habría sido vivir silenciada interiormente" y sentir su "libertad de expresión censurada por unos tribunales que intimidan y que aplican, descaradamente, criterios políticos". "Estas últimas semanas he vivido dentro de una prisión interna", añade.

La diputada eludió la prisión al pagar una fianza de 60.000 euros tras declarar como investigada el pasado 19 de febrero, un dinero que salió de la caja de solidaridad que en su día impulsaron la ANC y Òmnium.

A todo esto hay que añadir que el Parlament rechazó ayer jueves investir a Jordi Turull, candidato de Junts per Catalunya (JxCat), como presidente de la Generalitat tras no alcanzar los apoyos necesarios en la primera votación por las cuatro abstenciones de la CUP y los votos en contra de Ciudadanos, PSC, los comunes y el PPC.

Tras más de cinco horas de debate, convocado de urgencia por el presidente del Parlament, Turull sólo contó con los 64 votos a favor de JxCat y ERC. El diputado de la CUP Carles Riera concluyó: "Damos por acabado el procés. Pasamos honestamente a la oposición, a combatir al Estado y su dictadura, la autonomía y el autonomismo".

Lo dicho: el 'procés separatista catalán agoniza. Aunque está por ver la reacción de los separatistas...