• Nueve diputados del Interbloque Cambiemos (7 macristas y 2 radicales) presentaron un par de proyectos sobre aborto, uno para despenalizarlo y el otro para legalizarlo.
  • El de despenalización modifica el Código Penal introduciendo un coladero para todo tipo de abortos. Y el de legalización prevé aborto legal y gratuito, "en los casos enunciados en el artículo 86 del Código".
  • En la práctica, la liberalización del aborto.

En Argentina, nueve diputados del Interbloque Cambiemos (7 macristas y 2 radicales) presentaron un par de proyectos sobre aborto, uno para despenalizarlo y el otro para legalizarlo. Los dos expedientes sobre aborto de Cambiemos (el partido de Mauricio Macri), el de despenalización y el de legalización, fueron encabezados por Sergio Wisky. Según Notivida, los incisos 1° y 2° del artículo 86 del Código Penal, son dispositivos originariamente nulos e inconstitucionales y, de todas maneras, se encuentran derogados desde la suscripción y ratificación del Pacto de San José de Costa Rica y la Convención sobre los Derechos del Niño, que tienen rango constitucional. El expediente (443/2018) despenaliza el aborto a petición hasta la semana 14 y más allá de ese plazo si hay riesgo para la vida de la madre, si existe la "posible ocurrencia" de un peligro para la salud (física, psíquica o social) de la mujer; si el embarazo es producto de una violación o hay malformaciones fetales graves, incompatibles con la vida extrauterina. En ningún caso se requerirá orden judicial para llevar a cabo el aborto. La "posible ocurrencia" de un peligro para la salud de la mujer podría ser: "me parece que el embarazo me va a deprimir o "creo que no me va a alcanzar la plata para mantener al bebé" o "presumo que no estoy preparada para tener un hijo con síndrome de down". En la era de "la post-verdad", los abortistas pasaron de un peligro actual, cierto, grave, inminente e inevitable, para la salud física de la mujer; a la "posible ocurrencia" de un difuso peligro físico, psíquico o social. Los dos expedientes sobre aborto de Cambiemos fueron encabezados por el rionegrino Sergio Wisky. El de despenalización modifica el Código Penal introduciendo un coladero para todo tipo de abortos (Vid Notivida Nº 1079) y de legalización prevé aborto legal y gratuito, "en los casos enunciados en el artículo 86 del Código". Además, el de legalización obliga a todos los centros de salud a ofrecer la práctica gratuitamente en los casos previstos en el Código Es decir, en el segundo proyecto se pasa de la mera no punibilidad, a una obligación legal impuesta al Estado y a todos los centros privados que brinden servicios médicos, independientemente de la figura jurídica que posean y del ideario de la institución. "No nos cansaremos de reiterar que los incisos 1° y 2° del artículo 86 del Código Penal, son dispositivos originariamente nulos e inconstitucionales y, de todas maneras, se encuentran derogados desde la reforma constitucional del 94. Los dos proyectos de Wisky son, por ende, además de inmorales, inconstitucionales", dice Notivida. El expediente (444/2018) legaliza el aborto "en los casos enunciados en el artículo 86 del Código Penal". Todos los servicios de salud (públicos y privados) deberán practicar abortos. "La interrupción debe ser practicada por el equipo de salud sin intervenciones adicionales innecesarias, sean médicas, administrativas o judiciales." Bastará la "declaración jurada" de la mujer donde se indique el inciso del artículo 86 del Código Penal por el cual pide el aborto. En la primera consulta médica en que la mujer pida un aborto, el médico dispondrá para el mismo día o para el inmediato siguiente, la consulta con un equipo interdisciplinario. Este equipo le deberá informar sobre las características de un aborto y las alternativas posibles. A los dos días, como mínimo, la mujer debe ratificar su decisión. Se garantiza reserva y confidencialidad, es decir no habrá participación del cónyuge, por ejemplo. Si una menor quiere abortar y no están de acuerdo los "padres, tutores o encargados de acompañar la decisión de la niña o adolescente se procederá? a dar intervención a la Asesoría Tutelar correspondiente". Más allá de los padres, "se recomienda fomentar que las adolescentes cuenten con la compañía y el apoyo de una persona de su confianza durante el proceso". Los profesionales que sean objetores de conciencia lo deberán notificar por escrito a las autoridades del establecimiento de salud y aunque lo hagan estarán obligados a informar a la mujer que puede acceder a un aborto. "La objeción de conciencia es siempre individual y no institucional". De no cumplir lo normado se podrán considerar infractores pasibles de sanción: multas gravosas, inhabilitación, clausura total o parcial, temporaria o definitiva del consultorio o centro de salud donde haya actuado. En caso de reincidencia, se podrá incrementar hasta el décuplo la sanción aplicada. Las autoridades sanitarias podrán monitorear el cumplimiento de esta ley en cualquier centro de salud, mediante inspecciones y/o pedidos de informes. Los nueve diputados abortistas son el ya mencionado Sergio Wisky (Río Negro), Yanina Gayol (Entre Ríos), los bonaerenses Daniel Lipovetzky y Samanta Acerenza y los porteños Marcelo Wechsler, Anabella Hers Cabral y Fernando Iglesias. También estamparon su firma los radicales Karina Banfi y Miguel Angel Bazze, ambos de la provincia de Buenos Aires. José Ángel Gutiérrez joseangel@hispanidad.com