De 50 a 60 años se vacunarán con Janssen. Es la solución que ha encontrado la ministra de Sanidad, Carolina Darias, una señora muy inteligente.

¿La vacuna de Janssen es mejor que la de AstraZeneca? No. Bueno, basta con una dosis (ya verán como en breve serán más) pero también ha sido desechada por países cuyos políticos protegen antes a los ciudadanos que a su propio cargo. Por ejemplo, Dinamarca y Estados Unidos.

En cualquier caso: es una vacuna ADN, igual que AstraZeneca no ARM mensajero (Pfizer, Moderna y la nueva CureVac). Por lo demás Janssen y la de Oxford son vacunas gemelas y ambos han utilizado líneas celulares procedentes de abortos de forma mucho más intensa que las ARN.

Falló la OMS por declarar tarde la pandemia y los gobiernos porque no tomaron medidas: el grandísimo hipócrita Tedros entona un mea culpa

En el Congreso, don Narciso y don Soso se enzarzan en otro duelo fullero. Casado pide a Sánchez una ley orgánica para restringir derechos fundamentales.

Y es que líder conservador ha asumido que hay que restringir derechos fundamentales, aunque la primera oleada demostró que encerrar a los españoles no sirve para nada: tuvimos más muertos que cualquier otro país comparable, a pesar de ser los más salvajes con nosotros mismos. Una ley para restringir derechos fundamentales. ¿Por qué? A quien hay que restringir es al virus, no a las personas.

Otra noticia para este diario de pandemia. En el colmo de la hipocresía. Tedros Adhanom, el director general de la OMS, entona un mea culpa, no por haber fracasado frente al covid sino porque un panel de expertos le dice, 15 meses después, que debió declarar antes la pandemia. Una impostura: los expertos también riñen a los gobiernos por no haber sido aún más tiranos con los ciudadanos y le recuerdan a China, ¡año y medio después! que deben dejar entrar a los inspectores y no censurar lo que ellos digan. Tedros, uno de nuestros peores ciudadanos globales, ha dicho que tendrá muy en cuenta la recomendaciones de los recomendadores.

No hemos vuelto a la normalidad: seguimos en chándal

Trump tenía razón: cerremos la OMS… que no ocurrirá nada malo y mucho bueno.

Mientras tanto, la vuelta a la normalidad no es tal porque antes pasará el miedo que el virus. Seguimos en modo chándal: la elegancia ha muerto. No es una cuestión menor.