• Pero ya se cura en salud contra el homomonio: asegura que es imposible revocar la ley.
  • Marine Le Pen, derecha pagana, ha explicado en alguna ocasión que no se plantea "limitar el acceso al aborto en Francia".
  • Benoît Hamon apoya la legalización de la eutanasia.
  • Emmanuel Macron es defensor de la cultura de la muerte (aborto), de la ideología de género, del homosexualismo…
  • Y el comunista Jean-Luc Mélenchon se ha posicionado a favor del matrimonio homosexual, del aborto libre, de la eutanasia: de todo.
Los principales favoritos a las presidenciales francesas, el socioliberal Emmanuel Macron y la ultraderechista Marine Le Pen, han sido el blanco de la mayoría de los ataques en el primer debate electoral, que ha resultado animado y tenso por momentos, informa RTVE. Junto a Macron y Le Pen han participado el conservador François Fillon, el socialista Benoît Hamon y el izquierdista Jean-Luc Mélenchon, que ha ejercido de gran animador de la contienda con sus continuas interpelaciones al resto y su estilo incisivo. La religión ha provocado los primeros momentos de tensión en el debate, que había comenzado de forma tranquila, cuando los candidatos se han enzarzado a cuenta del "burkini", y Hamon ha espetado a Le Pen que ésta pretende "un laicismo al gusto", dirigido únicamente contra los musulmanes. Marine Le Pen no ha dudado en relacionar la llegada masiva de inmigrantes con la islamización de Europa: "Hay un auge del islamismo radical en nuestra nación. No se trata de promover el laicismo, se trata de acabar contra el comunalismo", ha asegurado para después añadir: "Que le quede claro, señor Macron, el escándalo del burkini ha reflejado todo lo que le estoy diciendo". Asimismo, la líder del Frente Nacional ha rechazado la financiación de la construcción de mezquitas en Francia. "La ley de 1905 prohíbe la financiación pública de cualquier centro religioso", ha advertido. Repasemos lo que piensan los candidatos en lo que respecta al resto de principios no negociables establecidos por el Papa Benedicto XVI  -respeto y la defensa de la vida humana, desde su concepción hasta su fin natural; la familia fundada en el matrimonio entre hombre y mujer; la libertad de educación de los hijos y la promoción del bien común en todas sus formas-. La líder del partido ultraderechista francés Frente Nacional (FN), Marine Le Pen, ha explicado en alguna ocasión que no se plantea "limitar el acceso al aborto en Francia". Le Pen también ha asegurado que derogaría la ley del matrimonio homosexual, aunque no "descasaría" a los que ya se han unido. Por su parte, Benoît Hamon apoya la legalización del cannabis y la eutanasia, según Wikipedia. François Fillon presenta tres propuestas importantes: la defensa de la familia, la protección a los cristianos perseguidos y la lucha contra el islamismo radical dentro de Francia. En cuanto a la familia, el político conservador se opuso firmemente a la Ley Taubira que aprobó los matrimonios homosexuales. Admite que es prácticamente imposible derogar del todo esa ley, pero si es presidente pedirá suprimir la adopción por homosexuales. Por ello, pretende limitar las adopciones a las parejas heterosexuales al igual que la procreación médica asistida para que sólo pueda ser utilizada por parejas infértiles pues debe ser "una solución médica para un problema médico". Y también quiere prohibir los vientres de alquiler, "una inaceptable explotación del cuerpo de las mujeres".  Es contrario al aborto "desde el punto de vista filosófico y religioso", aunque no tocará la ley. Emmanuel Macron es el hombre que más gusta al Nuevo Orden Mundial: ultraprogre, defensor de la cultura de la muerte (aborto), de la ideología de género, del homosexualismo… Mientras que Jean-Luc Mélenchon se ha posicionado a favor del matrimonio homosexual, el aborto libre y la eutanasia. Andrés Velázquez andres@hispanidad.com