La regulación bancaria, además de aumentar en exigencia, también es cada vez más cara, es decir, supone un mayor impacto en las cuentas de las entidades. Durante su intervención en el XXVI Encuentro del Sector Financiero, organizado por Deloitte, ABC y Sociedad de Tasación, María Dolores Dancausa ha desvelado que Bankinter, en 2010, pagó 10 millones de euros, cantidad que subió hasta los 83 millones en 2018. La factura de 2019 será de unos 100 ‘kilos’. “Hemos pagado más de 500 millones en los últimos nueve años. Son cifras muy importantes”, ha señalado.

La CEO de Bankinter no quiere que el nuevo Gobierno suba los impuestos o aplique nuevas tasas al sector financiero. “Da buenos resultados en el corto plazo, pero en el medio y largo plazo puede ser un desastre para las empresas”, ha afirmado.

Por cierto, ocho meses después de comprar EVO Banco, Dancausa sigue esperando la autorización correspondiente. No se ha quejado directamente, pero lo ha dejado caer como el que no quiere la cosa. Es mucho tiempo.