• Necesita dinero fresco (como UBS o Deutsche Bank) para salvar su solvencia y está abocado a otra ampliación.
  • O lo que es lo mismo: colocar el 10% de su capital entre gestoras y fondos.
  • No es la primera (en 2015 amplió en 6.000 millones) y acumula dos años en números rojos.
  • Los reyes del mambo no son las fortunas (Bill Gates o Amancio Ortega) sino especuladores (Warren Buffet).
  • Llega a un acuerdo en EEUU por las subprime que eleva en 254 millones las pérdidas de 2016.
Que Credit Suisse necesita dinero fresco no es un secreto, entre otras cosas porque el Gobierno suizo no está dispuesto a volver a rescatarlo, como en los turbulentos momentos de crisis financiera. Y a partir de ahí ha barajado mil opciones, desde abrazarse a viejos conocidos árabes (Qatar Holding o Olayan Group), pagando intereses de casi el 10%, o, ahora, ampliar capital de nuevo por 2.800 millones de euros. Y no es la primera vez porque la última ampliación de capital, en octubre de 2015, fue de 5.580 millones, equivalentes al 12,4% del capital. El segundo banco suizo tiene los mismos problemas que su colega, UBS (primero del país) o su vecino germano, Deutsche Bank: cumplir con las exigencias de capital. Paralelamente, los resultados (dos años en números rojos) tampoco le acompañan, a pesar de los duros ajustes en los dos últimos años, y encara cíclicamente multas millonarias por prácticas bancarias irregulares, un clásico de la banca de inversión. La ampliación que baraja se realizaría a costa de lo peor, dejar buena parte de su capital en manos de los fondos de inversión. De hecho, la fórmula consistiría en vender nuevas acciones, equivalentes al 10% del capital o más, mediante una colocación entre inversores institucionales, y fortalecer así el balance. Se confirma así que los que reyes de mambo ya no son las grandes fortunas, como las Bill Gates o Amancio Ortega, sino las que se acumulan en las gestoras y fondos de inversión, como la Warren Buffet. Y eso sino caen en manos peores, los fondos buitre. Con una ampliación de capital, Credit Suisse evitaría otra opción más amarga, la salida a bolsa de su filial bancaria en Suiza, uno de sus activos más golosos. Este viernes, por cierto, Credit Suisse ha anunciado que ha logrado un principio de acuerdo para salvar su responsabilidad en la crisis de las subprime en EEUU, que amplía las pérdidas de 2016. Supone una provisión extra de 254 millones de euros. El problema, sin embargo, es que abunda en lo anterior. Es decir, estropea más el ratio de solvencia (lo que pretende evitar con la ampliación). El ratio core tier 1 baja del 11,6% al 11,5% y el CET1, del 3,3% al 3,2%. Rafael Esparza