Este jueves, Valentín Bote, director de Randstad Research, ha valorado las cifras de paro registrado y de afiliación a la Seguridad Social de marzo, donde ya se ha notado el impacto negativo del coronavirus. En especial, ha advertido que sólo un día (el 31 de marzo) se perdieron 851.000 empleos, casi lo mismo que durante todo el año 2008 (-841.465 afiliados), cuando se vivía la anterior crisis económica.

Bote ha señalado que estamos en “un contexto inaudito en todos los niveles”. Y es que “la caída de la afiliación se ha ido agravando día a día”, hasta acabar el 31 de marzo con una caída de 851.000 personas, a pesar de que el Gobierno prefiera destacar que el descenso medio de la afiliación en el tercer mes ha sido de 243.469 personas.

Crece el paro y los demandantes de empleo por los ERTE, y desciende la contratación indefinida (-19%) y la temporal (-27%)

Desde Randstad Research también se ha referido el aumento del paro (+302.365), así como el de los demandantes de empleo debido a los ERTE (+150.000, al contabilizarse sólo los presentados ante la Administración, aunque se han anunciado muchos más). Asimismo, ha descendido la contratación, tanto la indefinida (-19%) como la temporal (-27%). No obstante, Bote confía “en poder recuperar rápidamente la normalidad”, si no hay cierres definitivos de empresas. Y para ello, alude a lo que ya han considerado algunos expertos: habrá recesión en la primera mitad del año, pero en la segunda se iniciará la recuperación, que seguirá en 2021, y “prácticamente absorberemos el impacto” del coronavirus.

El parón de servicios no esenciales afecta al 46,9% del empleo: una prueba numérica de que Sánchez ha puesto a la economía española en hibernación 

Paralelamente, el pasado miércoles, la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea), en un informe, estimó que el estado de alarma decretado el pasado 14 de marzo ha dejado entre 3 y 3,6 millones de afectados, lo que representa el 18,2% del empleo total. Eso sí, subrayó que el parón de los servicios no esenciales que se decretó el pasado 29 de marzo, elevó esas cifras a entre 9,2 y 9,3 millones de personas, lo que supone el 46,9% del empleo total. Una prueba numérica de cómo Pedro Sánchez ha puesto a la economía española en hibernación.