La vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, se ha desmarcado del ofrecimiento de la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, de traer el pesquero de Santa Pola con inmigrantes a Valencia y ha opinado que el barco debe ir "al puerto más cercano, que ahora mismo no es ningún puerto español", para "desembarcar a estas personas", recoge ABC.

La tripulación del "Nuestra madre de Loreto", con base alicantina y una docena de migrantes a bordo, lleva cinco días en espera y se encuentra en aguas de Libia.

En declaraciones a los medios antes de un acto del PSOE en Granada, preguntada por la petición de Oltra para que el Gobierno autorice que el pesquero español regrese a un puerto de la Comunitat Valenciana, se ha pronunciado en contra.

"Estos temas hay que tomárselos con la profundidad de quienes se están jugando sus vidas", como ha hecho, ha indicado Calvo, el patrón del pesquero español "con mucha dignidad", al "recoger a estas personas para que no corrieran peligro".

El Gobierno lleva tres días en conversaciones con las autoridades de Libia, donde está el puerto más cercano

El Gobierno lleva tres días en conversaciones con las autoridades de Libia, donde está "el puerto más cercano" que ya recogió una embarcación similar, "que también corría peligro", además de con el patrón del pesquero español.

Calvo ha manifestado que, ante esta realidad migratoria, el Gobierno de Pedro Sánchez ha desplegado "mucha seriedad" para ser capaz de "trasladar el único mensaje posible", que es que "somos una democracia que reacciona de manera humanitaria, que protege también la seguridad en nuestras fronteras".

En este sentido, el Ejecutivo apuesta por una "una inmigración ordenada, regular" y "legal" y trata de no "frustrar las expectativas de la gente que viene a nuestro país", ha proseguido Calvo, quien también ha afeado a "las derechas" que "todavía no se han enterado del bando en que tenían que estar" en lo relativo a Gibraltar, en las negociaciones para la salida del Reino Unido de la Unión Europea, que el Gobierno "ha defendido con firmeza y con éxito”.

Total: el Gobierno de Sánchez se estrenó acogiendo un barco con inmigrantes en las costas levantinas, gesto que vendió como humanitario. Desde entonces, el efecto llamada se ha multiplicado en España y ahora ha tenido que recular. Y es que gobernar a base de fotos no es posible…