El abogado Iván Duque asumió este martes como presidente de Colombia en sustitución del ganador del Premio Nobel de la Paz Juan Manuel Santos, por su acuerdo de paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Con apenas 42 años recién cumplidos se convierte en el mandatario colombiano más joven en los últimos 70 años.

Sin embargo, Duque apuesta por ajustar el acuerdo de paz con la guerrilla para impedir que el narcotráfico sea un delito amnistiable y obligar a que los antiguos comandantes rebeldes respondan ante la justicia antes de ocupar cargos políticos.

La postura de Duque ha motivado desunión en Colombia. Por ello, los obispos del país sudamericano hicieron un llamamiento a no dejar de trabajar por la paz y unidad del país, para que sea “patria y casa de todos”, y donde ningún tipo de violencia acabe con una vida más, recoge Aciprensa.

“Construir una Colombia en paz es una tarea que no da tregua y es un compromiso de todos”, afirmó en el video el Presidente de la CEC, Mons. Oscar Urbina. “Construyamos un país que sea patria y casa de todos”, insistió.

Por su parte, el Vicepresidente del Episcopado, Mons. Ricardo Tobón, alentó a la población a no dejar de trabajar por la unidad del país.

“No permitamos que el odio, que la venganza, que la inequidad, arruinen la vida de los colombianos. No permitamos que ningún género de violencia acabe con una vida más”, exhortó.

Mons. Elkin Álvarez, Secretario General de la CEC, indicó a los fieles que “para lograr este propósito es necesario que todos sembremos y cultivemos en el corazón el mismo amor por la patria”.

Asimismo, en el sitio web de la CEC se aseguró que “hoy, la batalla que libra Colombia es contra la corrupción, la gravísima problemática del sector salud, los cultivos ilícitos y el tráfico de estupefacientes, la polarización y la división, la inestabilidad social, y los atentados contra la vida y la familia”.