El Ayuntamiento de Barcelona de Ada Colau pretende empezar a cobrar el incremento de la tasa turística que los establecimientos hoteleros cobran a sus clientes, progresivamente a partir del 1 de enero de 2021 si el contexto es favorable. Fuentes del PSC aseguran que si el próximo enero la situación económica está como ahora, el aumento no se aplicará. "No tendría sentido ponerlo en marcha si no hay turistas" -estaría bueno-.

La subida prevista es de 0,75 euros para el próximo año, otro euro más en 2022, otro euro más en 2023 y 1,25 euros en 2024. Es decir que dentro de cuatro años, el importe de la tasa turística se habrá incrementado en cuatro euros.  

Una anécdota al respecto, cuando los periodistas de fuera de Barcelona acudan invitados a una rueda de prensa en la ciudad condal, que tengan dispuestas algunas monedas, porque el hotel lo paga la empresa que les convoque, pero la tasa, la seguirán pagando ellos, como ha ocurrido hasta ahora.

Por otra parte, Colau -siempre tan certera- no ha proporcionado cascos para patrullar en moto a una nueva promoción de la Guardia Urbana formada por 180 agentes. Según Ok Diario, la policía local barcelonesa no tiene suficiente dotación de esta herramienta y la alcaldesa propone al resto de los agentes que compartan sus cascos con los recién llegados, en pleno auge de contagios por coronavirus. ¡Ada, eres grande!