A medida que la pandemia del coronavirus va disminuyendo en China, el gobierno del país reanuda la eliminación de las cruces en las iglesias, a pesar del acuerdo con el Vaticano, firmado en 2018.

Según detalla UCA News, luego que se anunciara el alta del último paciente con COVID-19 en Wuhan, el epicentro del virus, los funcionarios del gobierno reanudaron la eliminación de cruces, libres de la presión de combatir la pandemia, recoge Aciprensa.

Uno de los templos afectados por estas medidas es la Iglesia de Nuestra Señora del Rosario en la diócesis de Anhui.

John, una fuente de la Diócesis a la que corresponde esta iglesia, indicó a UCA News que cinco días antes del incidente, los líderes de la parroquia se habían acercado a hablar con las autoridades locales para reparar el edificio, pero, lamentablemente se les indicó la existencia de un plan del gobierno para eliminar las cruces de las iglesias católicas y protestantes en el área.

Los fieles informaron de los hechos al obispo de Anhui, Mons. Liu Xinhong, quien les indicó que fueran a la oficina local de la Asociación Patriótica Católica China para pedir detalles sobre la eliminación de cruces. La información se les fue negada.

John indicó que días después, el 17 de abril, un funcionario local pidió las llaves del templo, señalando que seguía las “instrucciones de los superiores”, a pesar de no tener documentos que lo sustenten. Al día siguiente, la cruz fue eliminada por un grupo de jóvenes bajo el mando del estado.

Otro incidente similar sucedió el 19 de abril, cuando a horas de la madrugada se retiró la cruz de una iglesia en el distrito de Yongqiao

Otro incidente similar sucedió el 19 de abril, cuando a horas de la madrugada se retiró la cruz de una iglesia en el distrito de Yongqiao.

Según uno de los fieles, la operación estaba programada para la tarde, pero se realizó a las 4:00 a.m. (Hora Local), “probablemente para evitar que los católicos se reúnan” y quieran oponerse a la acción del gobierno.

Los oficiales de policía evitaron que las personas entraran a la iglesia, se reunieran afuera o tomaran fotografías, siendo confiscado el celular de aquellos que lo intentaran.

El último incidente en Anhui relacionado con la eliminación de cruces sucedió el 27 de abril, cuando las autoridades intentaron retirar la cruz de la iglesia protestante en Suzhou Road.

“La misma rutina y tácticas se utilizan en toda China”, indicó el sacerdote de Anhui, P. Chen. “Este no es el caso de una diócesis o provincia en particular. Está sucediendo en todo el país, pero la Iglesia continental está en silencio”, agregó. “Si las iglesias no se unen para resistir, se eliminarán muchas más cruces", concluyó.

En la Diócesis de Handan, Hebei, también se reportan casos de retiro de cruces, e incluso de demolición de iglesias enteras

En la Diócesis de Handan, Hebei, también se reportan casos de retiro de cruces, e incluso de demolición de iglesias enteras.

Un miembro de alto rango del clero, que no quiso ser nombrado, informó a UCA News que la diócesis ha recibido nuevamente indicaciones de las autoridades pidiendo la eliminación de cruces en cuatro iglesias de Feixiang.

El sacerdote agregó que desde 2019 el gobierno viene pidiendo a los católicos y otras religiones a hacer cambios en sus edificios de acuerdo a los requisitos de la ley, para poder hacerlos “legales”.

Desde octubre de 2018, se han eliminado cientos de cruces en China. Las diócesis de las provincias de Zhejiang, Henan, Hebei y Guizhou han sido parte de estos casos, luego de supuestamente violar las leyes de planificación.

En octubre de 2019, una iglesia en el condado de Guantao fue demolida por “ocupar ilegalmente tierras cultivables”. Solo este año, se han eliminado las cruces de dos iglesias en el condado de Qiu en Hebei.

El P. Chen comentó que la persecución a la Iglesia ha aumentado desde que el Vaticano firmó un acuerdo con China en septiembre de 2018 sobre el nombramiento de obispos.

El acuerdo tiene como objetivo fusionar la iglesia abierta administrada por el estado con la iglesia clandestina leal al Vaticano.

El P. Chen indicó que el gobierno chino no ha parado en la persecución incluso cuando el coronavirus estaba en su apogeo, y llamó a los católicos de todo el mundo a unirse para restaurar los derechos de los cristianos en China.