Carlsberg ha caído más de un 5,7% en bolsa, tras rebajar sus previsiones anuales, pues estima que el beneficio operativo caiga entre un 10% y un 15%. Asimismo, no espera que las ventas se normalicen en Europa Occidental este año, uno de sus principales mercados junto a China. Además, llevará a cabo cambios estructurales para adaptar el nivel de producción a la situación cambiante del mercado debido a los rebrotes de la pandemia. 

La cervecera danesa, que es la tercera más grande del mundo (por detrás de la belga-brasileña Anheuser-Busch Inbev y de la holandesa Heineken), ha resistido la crisis del Covid en el primer semestre, a pesar de registrar caídas de beneficios e ingresos, sobre todo, por el descenso de las ventas a bares y restaurantes. En concreto, el beneficio consolidado hasta junio se ha situado en unos 437,7 millones de euros, frente a los 475,8 millones de hace un año; y el Ebitda ha pasado de 985 millones 912,78 millones.

Por su parte, las ventas de Carlsberg en el primer semestre han sido de 3.871,6 millones, en comparación con los 4.430 millones de hace un año, un 28% inferiores. En Europa Occidental, cayeron un 14,7% y el beneficio operativo se desplomó un 20,8% y también el margen; mientras en Asia, la caída de ventas fue del 13,5% y ya están repuntando en China, y el beneficio operativo sólo bajó un 2,2% y subió el margen.