El CEO de Caixabank, Gonzalo Gortázar, presenta en  Valencia (que no en Barcelona y me temo que durante mucho tiempo) las cifras correspondientes a los nueve primeros meses del ejercicio 2019.

Y no son malas las cifras. El negocio de Caixabank crece un 4,4%. El margen de interés un 1,3% y las comisiones representan el 50% de ese margen o 1.900 millones de euros. A partir de ahí, peor: el margen bruto se nos cae un 4,2% y el margen de explotación un 40%. El beneficio atribuido al grupo se nos queda en 1.268 millones de euros.

Bancos-supermercado. En nueve meses, Caixabank ha vendido, y financiado, 14.500 automóviles, 49.500 alarmas y 241.500 móviles. Y en breve empezará con viajes

Los directivos de Caixabank insisten en que seguirán repartiendo la mitad de esa cantidad en dividendos, esto es, unos 630 millones de euros.

A ver muchacho, la calculadora; Criteria posee el 40% de esa cantidad. Eso supone que el grupo industrial, hoy más bien sociedad de cartera, de la fundación bancaria Caixa se llevaría 252 millones de euros.

Pero ojo, luego viene Paco, el de Hacienda con la rebaja fiscal, y luego habrá que ver cuánto dinero toma Caixa de Criteria.

Caixabank no cobrará a los particulares por los depósitos. Ahí rompe el consenso

Finalmente, recuerden que el presupuesto anual de la Fundación Caixa, la mayor de España, fue de 540 millones en 2019… y la conclusión es toda suya.

Volviendo a la cuenta, el negocio típico va bien y sigue girando alrededor de los clientes vinculados, generalmente a partir de la nómina -donde Caixabank mantiene una cuota de mercado superior al 26%-, es decir, a aquellos clientes que posen más de tres productos en la entidad.

Eso sí, esos buenos resultados se tumban cuando se computan los casi 11.000 millones de uros del ERE, y lo malo es que nadie sabe si el asunto va a continuar.

Quiero decir que la reducción de prsonal y de oficinas en banca es una proceso sin fin.

Ni Jordi Gual ni Gonzalo Gortázar están por una fusión con Bankia… que es la que quieren en el Banco de España

La otra nota distintiva del actual negocio bancario es el gusto por la clientela con liquidez. Es la clientea menor, la del puro pago de recibos, conlleva muchos gastos y todas las entidades quieren echarle hacia la banca digital. El problema está en los pensionistas… el cuerpo mayor de ese ejército y los más analógicos.

Más. Gortázar asegura que no va a cobrar por los depósitos, salvo a las empresa a las que siempre cobraba. A los particulares, no.

Y con todo, y aunque Caixabank ha marcado el modelo que siguen todas las entidades de banca al por menor, todo esto no basta. Por si acaso, Gortázar ha creado los bancos-supermercado: durante los nueve primeros meses del año, Caixabank ha vendido, y financiado, 14.500 automóviles, 49.500 alarmas y 241.500 móviles. Y en breve empezará con viajes. Ojo, los coches por la fórmula ‘renting’.

Fusiones: ni Jordi Gual ni Gonzalo Gortázar están por una fusión con Bankia… que es la que quieren en el Banco de España.

Gonzalo Gortázar sigue defendiendo que no había crisis, sólo desaceleración. Lo mismo decía Zapatero

Eso sí, Gortázar analizará oportunidades. Es decir, que, por más que se empeñen, al final lo lógico es que un grande absorba a un mediano: Abanca, Liberbank, Unicaja, Ibercaja, Kutxabank, etc.

Asunto catalán: No a la violencia. O sea todo un posicionamiento: por ejemplo, se distancia de Quim Torra.

Hombre ya nos lo imaginamos pero Gortázar sigue defendiendo que no había crisis, sólo desaceleración. Lo mismo decía Zapatero.