CAF ha pagado este jueves en bolsa los platos rotos de los resultados del primer semestre, que presentó ayer a cierre de mercado. A media mañana, sus acciones caían un 5,69%, una acogida negativa por tanto, como esperaban los analistas del Sabadell. Y es que se ha visto afectada por los menores márgenes y el nuevo Impuesto sobre Sociedades vasco.

Los márgenes son menores porque dos proyectos están yendo peor de lo esperado, según los analistas

En concreto, el margen Ebitda ha sido del 9,2% en el primer semestre, en lugar del 11,4% de hace un año; y el margen Ebit, del 7,1% frente al 9%. Descensos que los analistas del Sabadell explican sobre todo por dos proyectos que están yendo peor de lo esperado y que podrían seguir restando en el tercer trimestre. Por su parte, la nueva norma foral del Impuesto de Sociedades ha tenido un impacto negativo porque CAF ha pasado de pagar nueve millones a 19 millones, lo que supone un 107% más.

La empresa que preside Andrés Arizcorreta ha apostado por el crecimiento rápido y eso conlleva un coste.

La deuda financiera neta se reduce hasta los 206 millones, con un ratio de 1,1 veces el Ebitda

Todo esto, a pesar de que el fabricante de trenes y autobuses (tras la compra del polaco Solaris) ha ganado 18 millones (+12%) hasta junio y las ventas han crecido un 25%, hasta los 943 millones, aunque a menor ritmo que en el primer trimestre (+29%). Además, otro aspecto positivo es que CAF ha seguido desapalancándose: la deuda financiera neta se ha reducido hasta los 206 millones, lo que supone un ratio de 1,1 veces el Ebitda.