• Lo formarían dos cámaras: una sería el Parlamento Europeo que él preside, claro está, y otra con representantes de los gobiernos de Estados miembros.
  • Pide que se defina lo que los ciudadanos pueden esperar de la UE: debe concentrarse en asuntos que los Estados miembros no puedan resolver solos.
  • Los ministros de Economía y Finanzas de Alemania, Sigmar Gabriel y Wolfang Schäuble: proponen reducir la Comisión.
  • Otro germano, el comisario europeo Günter Oettinger se fija en otro asunto: apuesta por sancionar a España y Portugal por incumplir el déficit.
  • Mientras, en Reino Unido, Nigel Farage dimite como líder del UKIP tras cumplir su misión y Theresa May se perfila como la favorita para suceder a David Cameron.
Once días después de que Reino Unido optara por el Brexit, la construcción de Europa está en cuestión y ya se han empezado a escuchar propuestas de por dónde ir, sobre todo, desde Alemania. Entre ellas, destaca la del presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz (en la imagen), que quiere sustituir la Comisión por un auténtico Gobierno europeo. Así, lo ha señalado en el diario alemán Frankfurter Allgemeine, donde ha explicado que dicho Ejecutivo estaría formado por dos cámaras: una sería el Parlamento Europeo que él preside, claro está, y otra estaría compuesta por representantes de los gobiernos de Estados miembros. Además, Schulz no ha pedido "más Europa", sino que se defina claramente lo que los ciudadanos pueden esperar de la UE. Considera que esta debe concentrarse en asuntos que los Estados miembros no puedan resolver solos y no entrometerse en problemas que pueden solucionarse en el ámbito regional o nacional. Hace dos días, el ministro de Economía y vicecanciller alemán, además de presidente del partido socialdemócrata germano (SPD), Sigmar Gabriel, propuso reducir la Comisión para darle una estructura más efectiva. Y como dice el refrán, no hay dos sin tres. El ministro de Finanzas alemán, Wolfang Schäuble, ha dudado de la necesidad de que exista la Comisión. Y es que ante su lentitud y falta de firmeza, ha propuesto que se reduzcan sus cargos y competencias. Por tanto, parece que a los socialistas alemanes no les gusta mucho el órgano ejecutivo y legislativo de la UE, pero lo que quizá les agrade menos es que la preside Jean-Claude Juncker, miembro del Partido Popular Europeo. Pero hay que mencionar a un cuarto alemán, el comisario europeo de Economía y Sociedad Digital, Günter Oettinger, aunque por otro asunto. Y es que no ha dudado en apostar por sancionar a España y Portugal a causa de no haber cumplido el déficit. "Si queremos mantener la credibilidad, tenemos que decidir a favor de las sanciones", ha señalado en el diario Bild. Por su parte, el vicepresidente de la comisión, el letón Valdis Dombrovskis, con fama de duro, pero que no tiene animadversión hacia España como el comisario europeo para Asuntos Económicos, el francés Pierre Moscovici, es partidario de tomar "una decisión rápida" al respecto. Mientras, en Reino Unido, Nigel Farage ha dimitido como líder del UKIP tras cumplir su misión de sacar a su país de la UE. Claro que, como saben, no ha sido la única baja política: la más sonada ha sido la del primer ministro, David Cameron, y en el partido laborista ya calientan motores para buscar a su sucesor. En concreto, a partir del próximo martes, los tories conservadores tendrán una semana para votar a quien quieren que sea el próximo inquilino del número 10 de Downing Street, aunque la decisión final la tendrán los militantes en septiembre. Theresa May, secretaria de Interior , se perfila como la favorita y es partidaria de no invocar el artículo 50 antes de final de año. Y además, el pasado sábado, hubo una multitudinaria manifestación que pedía revocar el referéndum. ¡Vaya lío tienen montado en el patio inglés! Cristina Martín cristina@hispanidad.com