El respaldo al aspirante provida a la presidencia de Brasil, Jair Bolsonaro, subió levemente antes de la elección del próximo mes de octubre, según reveló el martes un sondeo, pero el candidato del Partido de los Trabajadores (PT), Fernando Haddad, se ubicó en segundo lugar y ambos disputarían una reñida segunda vuelta, recoge Reuters.

La encuesta de la empresa Ibope mostró que Bolsonaro, un excapitán del Ejército que ha explotado el descontento por el auge del crimen y la corrupción en el país, obtuvo el 28% de la intención de voto, un aumento de dos puntos porcentuales respecto a sus cifras de la semana pasada.

En el caso de una segunda vuelta el 28 de octubre, la consulta de Ibope reveló que Bolsonaro y Haddad estarían empatados

Haddad registró el 19% del apoyo de los votantes para la primera ronda, un aumento de 11 puntos desde el sondeo anterior, que fue realizado antes de que reemplazara oficialmente al encarcelado expresidente Luiz Inácio Lula da Silva como candidato. En el caso probable de una segunda vuelta el 28 de octubre, la consulta de Ibope reveló que Bolsonaro y Haddad estarían empatados, y ambos obtuvieron un 40% de aprobación de los votantes.

En los escenarios de la primera vuelta, el candidato de centroizquierda Ciro Gomes se estancó en un 11%, y el favorito de los inversores, Geraldo Alckmin, perdió dos unidades para ubicarse en el 7%, mientras que la ambientalista Marina Silva cayó 3 puntos, a un 6%.

El sondeo mostró que Bolsonaro tiene la mayor tasa de rechazo, en un 42%, lo que podría jugarle en contra en una eventual segunda vuelta. Haddad tenía una tasa de rechazo de un 29%, lo que indica que su respaldo tiene espacio para crecer.

Bolsonaro, apuñalado en un intento de asesinato, no podrá volver a hacer campaña antes de la primera vuelta

Bolsonaro ha hecho campaña promoviéndose como el hombre que terminará con la corrupción política y frenará el retorno del Partido de los Trabajadores, al que muchos responsabilizan por la reciente recesión económica de Brasil. Cabe destacar que fue apuñalado el 6 de septiembre en un intento de asesinato que casi tiene éxito. Debido a su estado, no podrá hacer campaña antes de la primera vuelta, es decir, de la votación de 7 de octubre.

Haddad, un exalcalde de Sao Paulo, se ha presentado como un moderado y espera atraer los votos de los partidarios de Lula, quien aún es el político más popular de Brasil a pesar de que está en prisión tras ser hallado culpable de cargos de corrupción y se le prohibió postular a la presidencia.