Lunes 21 de septiembre. La bolsa de Madrid se derrumbaba un 3,43% pero tranquilos: mal de muchos consuelo de tontos. París cierra con una caída del 3,74, con un Londres que se derrumba el  3,38 y Milán un 3,75, por un 4,37% el DAX de Francfort. Vamos, que casi podemos darnos con un canto en los dientes.

Esta vez no es la bolsa española: en toda Europa ocurre lo mismo. Mal de muchos

IAG caía más del 13%, los valores turísticas por los suelos y los bancos destrozaban la bolsa madrileña.

¿Qué está ocurriendo? Pues ocurre que a los mercados, es decir, a los analistas y perdedores les ha entrado el pánico al virus y reaccionan como buena parte de la población: de forma histérica. Ya no piensan si vendrá una segunda oleada: ahora están convencidos de que ya ha llegado.

Caen aerolíneas (con IAG a la cabeza, por encima del 13%), empresas turísticas y bancos

Curioso porque el rebrote no mantiene, ni de lejos, la misma mortalidad que en abril, pero el miedo es libre y bastante irracional.