En medio del brote mundial de coronavirus COVID-19 y las estrictas órdenes de distanciamiento social en el Reino Unido, el Gobierno revirtió nuevamente una política y ahora las mujeres podrán realizarse abortos químicos desde su casa hasta el fin de la crisis.

El anuncio provocó la consternación de los grupos provida locales, que señalaron que los abortos realizados con dos píldoras son peligrosos para las mujeres, incluso cuando se realizan después de una consulta ante un médico.

La Mayo Clinic (Clínica Mayo) enumera los riesgos potenciales del aborto con medicamentos como el aborto incompleto, sangrado abundante y prolongado, infección y fiebre, entre otras posibles complicaciones.

Un aborto con medicamentos, conocido como aborto químico, es un proceso de dos pasos que involucra la ingestión de mifepristona y misoprostol. La mifepristona mata de hambre al bebé nonato al bloquear los efectos de la hormona progesterona e inducir un aborto espontáneo. El misoprostol se toma hasta dos días después e induce el parto.

Las mujeres en el Reino Unido ya pueden tomar el segundo medicamento en casa, después de tomar el primero en una clínica médica y de obtener la aprobación de dos médicos, según lo exige la ley.

“Es inconcebible que el Gobierno contradiga su postura, una vez más, para permitir que las mujeres aborten en dos pasos con medicamentos en el hogar”, dijo el 30 de marzo Liz Parsons, directora de Life, una organización provida del Reino Unido.

“Es una vergüenza absoluta que el lobby del aborto se aproveche de la terrible situación en la que nos encontramos, con el COVID-19, para instigar el mayor cambio a la Ley de Aborto de 1967 que hemos visto en años, sin ninguna consulta pública”, añadió.

Según un portavoz del Gobierno, las mujeres que busquen abortos médicos podrán tomar píldoras abortivas (mifepristona y misoprostol) en el hogar hasta la décima semana de embarazo. Los médicos envían las píldoras por correo al paciente después de consultar con ellas por teléfono o un enlace de video.

La ley de aborto del Reino Unido había ordenado previamente que los abortos solo se realicen en un hospital, por un proveedor especializado o en una clínica autorizada, con la aprobación de dos médicos.

La decisión del Gobierno de permitir que las mujeres tomen ambas píldoras abortivas en el hogar se limitará a dos años o hasta el final de la crisis del coronavirus, dijo el vocero el lunes. Deben ser los efectos colaterales del coronavirus, no provocados por el coronavirus sino por el odio de tantos a la vida del más inocente y el más indefenso.