A ver si nos entendemos: lo que se está juzgando en la Audiencia Nacional de San Fernando de Henares (Madrid) es si hubo engaño en la salida a bolsa de Bankia, y en toda OPV, lo más importante es el precio al que salen a cotizar las nuevas acciones, esto es, el valor de la empresa.

Pues bien, según el presidente de Lazard en España -y tío político de Ana Botín-, Jaime Castellanos Borrego, Bankia debió salir a bolsa con un precio comprendido entre los 4,41 y los 5,05 euros por acción, la banda de precios que Lazard recomendó incluir en el folleto de la operación. Al final, sin embargo, el precio se fijó en los 3,75 euros por título.

“En esa época, había unas turbulencias dentro del sector financiero y bursátil tremendas y había operaciones que se paraban en el proceso de salir al mercado u otras que salían con dificultades. En un momento dado, Lazard lo que pudo decir es que había una oportunidad, una ventana, pero el mercado marcaba a qué precio”, ha señalado Castellanos este martes, durante su comparecencia como testigo.

Pues si Lazard, que actuó como asesor financiero, creía que el precio de la OPV todavía tenía que haber sido más elevado, ¿quién fue el culpable de todo?