• Por provocar un incendio en el centro de acogida en el que residía.
  • Y por otros delitos como robo, amenazas y agresión, según la prensa italiana. Una joya de chavalote.
  • Cumplió cuatro años de reclusión en lacárcel de Ucciardone de Palermo, capital de Sicilia, donde pudo entrar en contacto con radicales islamistas.
  • Después se le comunicó el decreto de expulsión, pero nunca volvió a Túnez y se le perdió el rastro.
La Policía alemana ha realizado varios registros en las últimas horas dentro de la operación de búsqueda del principal sospechoso relacionado con el atentado del pasado lunes en Berlín, el tunecino Anis Amri (en la imagen). Sin embargo, la Fiscalía ha negado que se hayan producido detenciones, como informaban varios medios de comunicación. Los agentes han registrado un centro de acogida de refugiados en Emmerich, en el estado de Renania del Norte-Westfalia, donde vivió Amri. El diario Die Welt informa de que un comando del cuerpo especial de la Policía (SEK) entró a última hora del miércoles en dos viviendas en Berlín, una de ellas en el barrio de Kreuzberg. Una persona fue reducida pero no detenida, y no se encontró ninguna pista del sospechoso, según el diario. Anis Amri, de 24 años, se ha convertido en la persona más buscada en Alemania tras encontrarse documentación suya en la cabina del camión con que se cometió el atentado, en que murieron doce personas y medio centenar resultaron heridas. Medios alemanes aseguran que sus huellas dactilares también han sido identificadas en la puerta del vehículo, pero las autoridades aún no han confirmado este extremo. Los medios de comunicación italianos informan del supuesto periblo de Amri en Europa. Según estas informaciones, Amri desembarcó en la isla italiana de Lampedusa en 2011, a bordo de una patera. En julio de ese año fue detenido por provocar un incendio en el centro acogida en el que residía y por otros delitos como robo, amenazas y agresión. Cumplió cuatro años de reclusión en la cárcel de Ucciardone de Palermo, capital de Sicilia, donde según las mismas fuentes pudo entrar en contacto con radicales islamistas. Después se le comunicó el decreto de expulsión, pero nunca volvió a Túnez y se le perdió el rastro. Andrés Velázquez andres@hispanidad.com