Sebastián Albella, presidente de la CNMV, ha seguido los pasos del Gobierno, pues ha autorizado la OPA de la bolsa suiza (SIX) sobre la española (BME). Es decir, ha refrendado la peor decisión, en el peor momento, aunque en su caso la postura parece comprensible, considerando los asesores de SIX.

Como informamos en Hispanidad, el operador de la bolsa de Zúrich (la principal de Suiza) ha tenido como asesor jurídico al despacho de abogados Linklaters, el mismo que dirigió Albella antes de ser nombrado presidente del regulador bursátil. Mientras que los asesores financieros de la operación han sido Credit Suisse y Alantra, el grupo financiero liderado por Santiago Eguidazu donde trabaja Francisco Albella, hermano de Sebastián, como jefe del Departamento Legal y secretario de la Junta Directiva.

Ahora la última palabra sobre la OPA (a un precio de 33,4 euros por acción y un importe total de unos 2.800 millones de euros) la tendrán los accionistas de Bolsas y Mercados Españoles (BME), en la Junta que se celebrará, previsiblemente en segunda convocatoria, el 29 de abril en el Palacio de la Bolsa, en Madrid. Habrá que esperar entonces, pero no hay que olvidar que SIX se ha comprometido a mantener en España las operaciones durante 10 años, salvo que se den cambios en las condiciones de negocio o económicas, en cuyo caso debería pedir permiso... a la CNMV.

Todo muy legal y muy poco elegante. Y un caso que recuerda otra de las etapss profesoinales del presidente de la CNMV. Fue el propio Sebastián Albella quien, como socio director de Linklaters, aprobó, y con entusiasmo, la crucial ampliación de capital del Banco Popular de mayo de 2016. Un año después, tras la intervención, Albella, ya presidente de la CNMV, se alineó con quienes aseguran que las cuentas del Popular no reflejan la situacion real de la entidad, entrando en contradicción con los propios peritos del Banco de España. ¡Cosas veredes, amigo Sancho!