A otra cosa mariposa. Tras las calabazas, el portazo, el “no es no” y el “yo no voy contigo ni a la vuelta de la esquina” de Albert Rivera a Pedro Sánchez, o mejor dicho de Rivera a los pesos pesados de su equipo tanto en el Gobierno como en Moncloa, es decir Ivan Redondo y José Luis Ábalos, el presidente, en Osaka, tras la cumbre del  G20 y ante los medios apremia a Podemos y, eso sí, suaviza su órdago y hace algunos cambios sobre el guion establecido como el de la reflexión  sobre el hecho de que la colaboración de Unidas Podemos, “partido con el que llevamos ya 12 meses”, ha sido fundamental para sacar adelante numerosas reformas como la subida del salario mínimo o la vuelta a la cobertura universal de la sanidad pública. “La propuesta que ha hecho el PSOE es razonable y sensata y obedece a una cooperación mayor situando a UP como socio preferente. Urge a Iglesias a investirle en julio porque “España no se puede parar, ha de haber nuevo Gobierno en julio y no en agosto ni en septiembre”.

Pedro Sánchez piensa que el momento es ahora y que tendrá que reeditar los apoyos de la moción de censura si quiere marcharse de vacaciones investido

La insistencia en que sea este mes de julio se justifica porque Pablo Iglesias da por hecho que la de julio será una investidura fallida porque no contará con los apoyos suficientes. Unidas Podemos opina que las negociaciones con el PSOE han brillado por su ausencia y que Pedro Sánchez no se aviene a su exigencia irrenunciable de un Gobierno de coalición. Es decir, cree que Sánchez solo se moverá tras sufrir el varapalo del "no" en el Congreso y acabará así aceptando sus condiciones. Pero el PSOE y el Ejecutivo, y este mismo sábado el propio presidente, presionan e insisten en que hay que pensar solo en julio para evitar estar pendientes de que se agota el plazo de dos meses que concede la Constitución, después de una primera votación, y que lo de septiembre será ‘un paseo’. En definitiva, el momento es ahora y, en definitiva, que Sánchez tendrá que reeditar los apoyos de la moción de censura si quiere marcharse de vacaciones investido.

"La propuesta que ha hecho el PSOE es razonable y sensata y obedece", asegura el presidente, "a una cooperación mayor situando a UP como socio preferente"

Una opción que el ‘negociador’ Ábalos rechaza igual que Ivan Redondo cuya apuesta siempre ha sido llegar a un acuerdo con Ciudadanos. Pero el pasado viernes Alber Rivera fue contundente y desafió los condicionamientos internos y externos que pretenden que reconsidere su "no" a la investidura de Pedro Sánchez. El líder de Cs reaparecía tras la primera gran crisis de su partido, que se ha saldado con varias dimisiones en la cúpula, con un mensaje rotundo ante quienes quieren que cambie de estrategia: “Si algunos piensan que el sanchismo tiene que campar a sus anchas, que presenten un partido político”. Rivera busca liberarse de la presión de las élites económicas, las mismas que aplaudieron su entrada en política nacional.

Lo que está claro es que Pedro Sánchez solicitará la confianza del Gongreso este mes pese a no tener los apoyos necesarios y ha comunicado que el próximo 2 de julio se reunirá con la presidenta de la Cámara, Meritxell Batet, para fijar ya una fecha de investidura.