AENA ha confirmado que no ejercitará la opción de compra del 49% que no controla del aeropuerto de Luton por una razón fácil de comprender: “no considera aceptables las condiciones económicas”, dice en el comunicado a la CNMV.

Ese 49% está en manos del fondo de inversión Ardian y, aunque AENA no habla de cifras, el pago, de ejecutarse, variaría entre 190 y 320 millones -es decir, bastante- según los cálculos de los analisas, que coinciden no obstante en una realidad: el aumento de esa participación apenas significa nada para el gestor.

El gestor “no considera aceptables las condiciones económicas” del fondo Ardian

Es el quinto mayor aeropuerto británico, que podría comprar sin problemas por la capacidad de AENA para generar caja, pero ni supone un cambio estratégico, como recuerda el Sabadell, y “todo indica que el precio pedido por Ardian será exigente”, añade Bankinter.

La mezcla de esas dos razones explica lo demás: el activo ya consolida en las cuentas del gestor español por su 51% y su peso no supera el 2,5% del Ebitda, entre poco y menos. Y si encima Ardian se excede en lo que pide, en cuyo caso es mejor renunciar a comprar que pagar de más.

El control del Estado (51%) provoca recelos de otros gobiernos en las adjudicaciones

Otra cosa es la consideración, en la que entran los analistas de Bankinter, de las escasas oportunidades reales de AENA para crecer en su negocio típico, debido al control del Estado del 51% y la mala cara que pone por ello cualquier gobierno a la hora de adjudicar la concesión de un aeropuerto.

La reacción en bolsa ha sido negativa pero en línea con el Ibex. No ha tenido impacto en la cotización, por tanto, como sí lo tuvo cuando salió a escena esa opción, a principios de marzo.