• Recuperarán los canales a cambio de un mejor trato en año electoral. Y RTVE condenada a pérdidas: no emitirá publicidad.
  • Pero es que el PP se había vuelto histérico: ofrece al Duopolio frecuencias a cambio de 'amabilidad' en los contenidos.
  • Los 'argumentarios' de Carmen Martínez de Castro con los tertulianos afines: otra barbaridad del PP en materia de comunicación.
  • Ahora bien, Tele 5 y Antena 3 TV ya se preparan para incumplir lo pactado.
  • En el PP no entienden que los señores de la tele no pueden renunciar a la telebasura: son esclavos de la audiencia.
  • Y Cuatro y La Sexta seguirán incendiando España.
  • Catalanes y andaluces retrasan la concesión del canal de TDT.
  • Lara no se opone un canal para 13TV, Tele 5 sí.

Partimos de un enunciado fundamental: por primera vez en toda la legislatura, Mariano Rajoy se ha percatado de que puede perder las próximas elecciones generales (y antes, las autonómicas). Por eso, el que siempre se negó a pactar con el Duopolio televisivo (Mediaset-Atresmedia) ahora ha tenido que agachar la cabeza.

Hasta ahora, el PP ofrecía al Duopolio Lara-Berlusconi (en la imagen) frecuencias a cambio de más 'amabilidad' en los contenidos. Es más exigían las cabezas del mendaz Wyoming, del descerebrado Cintora y la supresión de los programas nocturnos del sábado, tanto en Tele 5 como en La Sexta. No sólo eso, los intentos, fallidos, por controlar las televisiones por la vía de los tertulianos han caído en saco roto. Famosos han sido los argumentarios de la secretaria de Estado de Comunicación, Carmen Martínez de Castro, dirigidos a explicarles a los tertulianos afines qué mensajes debían lanzar en cada momento.

No se daban cuenta de que el Duopolio televisivo y su cuatro armas políticas (A3 TV, Tele 5, Cuatro y La Sexta, sobre todo estas dos últimas, dedicadas a incendiar España) no pueden salir de la telebasura imperante porque son prisioneros de la audiencia y han creado un país de intelectualmente indigentes.

Por eso ha tenido que llegar al pacto, que han arbitrado la vicepresidenta del Gobierno, Sáenz de Santamaría, y el ministro de Industria, José Manuel Soria. El Duopolio recuperará los canales que les arrebató el Tribunal Supremo en un nuevo concurso de cinco canales, a cambio de que bajen el diapasón y dejen de presentar un país tenebroso al borde del colapso, que eso es lo que les mola.

Luego están los pormenores. Por ejemplo, en el futuro concurso no habrá sitio para multinacionales (como si Mediaset no lo fuera). En cuanto a los obispos, Lara está dispuesto a que se le conceda una licencia a 13TV, pero Paolo Vasile no.

¿Van a cumplir el pacto? Por supuesto que no. Lo que ha hecho el Duopolio es subir el tono durante las últimas semanas de negociación para luego venderle al Gobierno que ha reducido el nivel de crítica… hasta 'do solían'.

En todo el entramado hay otra cesión: la condena a pérdidas de RTVE. La vuelta de la publicidad, una de las alternativas para capear su delicada situación económica, queda aparcada. Está claro: esa decisión hubiera mermado los ingresos del Duopolio.

En resumen, Mariano Rajoy queda en manos de José Manuel Lara y Silvio Berlusconi. Y las encuestas siguen diciendo que no.

Eulogio López

Eulogio@hispanidad.com