Sr. Director:
La victoria, en las últimas elecciones francesas, ha sido para el centro-derecha de Sarkozy.

Faltan dos años para las presidenciales pero está claro que los franceses han querido castigar las políticas de Hollande, que llegó a la presidencia como el político que era capaz de ofrecer una alternativa a las políticas de austeridad de Merkel.

A la hora de la verdad ha desarrollado una política errática en el campo económico, y radical en temas de familia y derechos, suscitando un fuerte rechazo. 

Afortunadamente el voto de castigo se ha canalizado hacia una opción plenamente europea que no cuestiona el marco institucional. Si el populismo siguiera desinflándose la buena noticia sería excelente.

Jesús Domingo Martínez