Sr. Director: La votación del día 15 en el Congreso de los Diputados sobre la mínima reforma de la ley del aborto presentada por el PP, refleja las contradicciones internas del Partido Popular a propósito de una ley que iba a marcar el auténtico peso de las convicciones de su mayoría absoluta. La toma en consideración del proyecto, que se resumía en un mínimo retoque de la ley, superó esta prueba inicial pese a la disidencia de cinco diputados populares que ejercieron su libertad de conciencia para mostrar que su partido ha abandonado una de sus señas de identidad, y ha traicionado su compromiso con los electores de reformar la ley Aído, que sustancialmente queda como estaba. Ahora existe la posibilidad de que estos diputados presenten enmiendas que mejoren el texto y que el propio Gobierno introduzca una cláusula que deje bien claro que el aborto no es un derecho humano, como pretende la izquierda que con tanto entusiasmo respaldó la iniciativa de Zapatero. D. M.