Sr. Director: La ONU ya decidió intervenir en 1992 en Somalia para poner fin al infierno de una guerra civil que, sin embargo, se agravó después del fracaso de la "Operación Restaurar la Esperanza". La guerra entre facciones cambió de fisonomía con la aparición de los atentados terroristas que han sobrepasado en crueldad a todos los que vienen registrándose en otros países africanos. Lo grave es que antes del horrible atentado, el del 15 de octubre,  ya habían aparecido las primeras fisuras en el Gobierno de Abdulhadi con la dimisión del ministro de Defensa y del jefe del Ejército, con lo que toda la esperanza de una reconciliación nacional ya empezó a disiparse. La pregunta ahora es qué futuro espera a este país, pobre entre los pobres, sumido en la hambruna y falto de medios para afrontar un terrorismo empeñado en impedir cualquier atisbo de estabilidad, no solo en Somalia sino en los países vecinos, especialmente Kenia. J.D. Mez