Sr. Director: Partiendo de que no es posible el retorno al mundo anterior a la globalización, y que sus políticas deben tener en cuenta a las familias y a la gente trabajadora, Ángela Merkel ha insistido en la defensa de los valores del Estado de Derecho como garantía de la convivencia. La canciller se ha referido al burka y ha asentado la doctrina de que a una sociedad abierta le corresponde ir con el rostro descubierto, apuntalando su plan de prohibir el velo integral allí donde sea posible. Merkel es consciente de que no hay soluciones simples al populismo y que su apuesta por ser la locomotora alemana necesita de claridad de ideas y de juicio. Suso Madrid