Sr. Director: Un estudio halla que no representan mayores riesgos que los convencionales. Para ciertas corrientes ecologistas, los cultivos transgénicos han estado por mucho tiempo en el bando de los villanos. Ahora, sin embargo, un detallado estudio de las estadounidenses National Academies of Sciences, Engineering and Medicine (NAS) contradice esa idea. Según el comité investigador, no se ha logrado detectar ningún efecto dañino de los cultivos transgénicos para la salud y el medio ambiente, y a este respecto no hay diferencia sustancial entre estos y los convencionales. "Desde los años 80 -señala el informe-, los biólogos han empleado la ingeniería genética para inducir en las plantas características particulares, como una mayor duración de los frutos, un mayor contenido vitamínico y la resistencia a enfermedades. Sin embargo, las únicas características que, obtenidas a través de la ingeniería genética, han sido derivadas hacia un amplio uso comercial, han sido las que permiten al cultivo resistir la aplicación de un herbicida o hacerse inmune a las plagas de insectos". Justo porque esas dos características han sido las más difundidas, es por lo que los expertos de las NAS se abstienen de emitir una declaración más general sobre los beneficios y riesgos de los transgénicos. En todo caso, tras examinar casi 900 investigaciones acerca de las modificaciones genéticas artificiales en cultivos de soja, maíz y algodón, el comité de la NAS hace una clasificación de los posibles efectos en tres áreas: la salud humana, el medio ambiente y la agricultura. Domingo Martínez