Sr. Director:

La presión fiscal no cesa. El Gobierno socialista, mientras explora acuerdos impositivos con sus potenciales socios de Podemos, se ha puesto “manos a la obra” con el pequeño comercio y las pymes. Tras la campaña de cartas para pedir corrección en sus declaraciones, Hacienda ha iniciado una segunda fase de su Plan IVA y ha empezado a “visitar” estos establecimientos. Un “ejército” de más de 4.800 agentes tributarios para mantener una presión fiscal clave. Otra cosa será el criterio con que se gaste ese dinero.