Sr. Director:

Ese testimonio, el que dieron los balcánicos durante el nazismo y el comunismo, en ocasiones heroico, sigue teniendo un gran valor hoy día y el Papa ha invitado a los cristianos de Letonia a seguir dándolo en común, mediante un ecumenismo vivo que toque el corazón de las gentes. Ese ecumenismo es un antídoto eficaz contra el riesgo cierto de convertir la fe en una reliquia del pasado.

Nuestra fe, que también en nuestro tiempo se ve puesta a prueba, no es una pieza de museo. Antes bien, el desarrollo requiere estar arraigado en el pasado, poner toda la creatividad posible en el presente y la confianza y esperanza en el futuro.