Sr. Director: No sabemos si se trata de una moda, de una estrategia de imagen y de ventas, o de algo que ha llegado para quedarse, pero los grandes grupos de la distribución comercial se han apuntado con cierta profusión a la gestión de los alimentos que les sobran y que antes se consideraban residuos por estar próxima su fecha de caducidad o por haber caducado ya. Ahora, por ejemplo alguna gran superficie apuesta por la "economía circular" en los subproductos alimentarios, que ya no se tiran, sino que son derivados a bancos de alimentos o a otros procesos productivos (elaboración de zumos y salsas), de acuerdo con sus interproveedores. Otros grupos están siguiendo también un camino similar e intentan valorizar los alimentos que antes iban al cubo de la basura. Pienso que es cuestión de felicitarles y felicitarnos los que llevamos años reciclando y pidiendo que se deriven los alimentos sobrantes hacia los más necesitados. Estamos entrando en la línea que en parte propugna el papa Francisco. Domingo Madrid