Sr. Director:

Según ha declarado el Presidente de la Generalitat, Quim Torra, “la democracia está por encima de la ley”, es decir, de la Constitución que la consagra. Aquí está el nudo del problema, como aclararon los fiscales en el Supremo: no existe democracia al margen de la legalidad.  Las leyes pueden cambiarse, pero en sede parlamentaria y cuando así lo demanda la mayoría social en las urnas. Lo que han hecho los secesionistas ha sido violentar la ley mediante un acto revolucionario destinado a imponer su proyecto, por eso su acción ha constituido una grave amenaza para nuestra democracia. Por eso no podían ser socios fiables de ningún Gobierno, algo que el Presidente Sánchez no parece haber comprendido hasta el último momento.