Sr. Director:

El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha anunciado que pondrá en marcha lo que ha llamado "ingreso mínimo vital", una idea copiada en fondo y forma de las propuestas políticas de partidos populistas.

Se convertiría en una extensión indefinida de la prestación por desempleo para las familias más necesitadas y se enmarcaría en un plan de multiplicación de los recursos destinados a paliar la pobreza hasta alcanzar los seis mil millones de euros al año. Hay que reconocer que la preocupación por la desigualdad es siempre loable, sobre todo cuando no viene de la mano de la demagogia. Sánchez parece haber entrado en campaña con propuestas que más parecen ocurrencias electoralistas que proyectos serios encaminados a mejorar de verdad la vida de los ciudadanos. Su idea recuerda demasiado a aquellas de Zapatero como el cheque-bebé, que fueron ineficaces tal como se concibieron, y que tan irresponsablemente dispararon el gasto público.

JD Madrid