Sr. Director: 

Las organizaciones, Boko Haram y Al Qaída, basan su estrategia en la agitación entre tribus rivales y la captación de reclutas locales a los que se unen los que llegan de Irak, Siria, Egipto, Túnez, Argelia y Marruecos. Una de sus fuentes de financiación es el tráfico de drogas que llegan de Sudamérica a las costas africanas, ante la impotencia de las autoridades locales. Además de pedir más apoyo de las Naciones Unidas, la Comunidad del Oeste africano ha acordado formar una gran coalición para detener el avance de estos grupos, cada vez más numerosos y mejor armados. La Unión Europea debe tomar buena nota de lo que está ocurriendo al otro lado de las fronteras mediterráneas, donde se libra una lucha feroz por la imposición de un Islam radical que tiene puesta su diana no solo en África sino en Europa.