Sr. Director: En los últimos tiempos, Rajoy, a través de su Vicepresidenta, está haciendo todo lo posible para asentar las bases de un diálogo con la Generalidad de Cataluña que transcienda el obligado marco económico. Los problemas para el gobierno de Puigdemont se agravaron una vez que el nacionalismo catalán de centro derecha perdió su veta negociadora poniéndose en manos de los radicales antisistemas de la CUP. La permanente actitud de desafío al Estado de la CUP y los chantajes a los que está sometiendo al ejecutivo catalán, aumentan la inestabilidad y someten a la sociedad catalana a una tensión y a un estado de desgobierno que no puede durar. ¿Cuándo se producirá una reacción del catalanismo moderado que se ha refugiado en los cuarteles de invierno? Reconozco que en este momento no es fácil, tienen copados los medios y dar la cara en unas circunstancias como las que se están viviendo es exponerse a una bestial crítica. Pedro García