Sr. Director:

Algunos autores empiezan a superar una forma de laicismo anticuado. Un ejemplo es el último libro del politólogo Victor Lapuente, catedrático de la Universidad de Gotemburgo, el Decálogo del Buen Ciudadano. Lapuente, que es un pensador laico, sostiene que buena parte de lo que nos sucede en la vida pública tiene que ver con un egocentrismo que cada vez nos hace más narcisistas.

Según él, ese narcisismo sería consecuencia de que la derecha ha matado a Dios y la izquierda se ha vuelto individualista y ya no cree en la patria. Tradicionalmente la derecha se había apoyado en principios judeocristianos y así había construido Europea. Pero a su juicio ahora sólo cree en el mercado y en el beneficio personal. Tradicionalmente la izquierda, por su parte, había creído en los proyectos comunes, no sélo en la reclamación de derechos subjetivos, pero eso empezó a cambiar en los años 70.