Sr. Director: Es preciso desenmascarar ante la opinión pública extranjera el discurso mentiroso sobre España que durante años ha extendido el nacionalismo catalán. Porque no basta con tener razón, hay que saber trasladar la verdad de los hechos, mucho más en un mundo globalizado, en el que las redes de comunicación funcionan sin el menor control de calidad de sus contenidos. El Ministerio de Asuntos Exteriores tiene ante sí, las próximas semanas, una ardua, pero imprescindible, labor de convencimiento y persuasión de la auténtica realidad española, no sólo entre las cancillerías, que conocen en su mayoría la alta calidad de nuestra democracia, sino entre los medios de comunicación anglosajones, siempre más inclinados a que perdure el mito de la España "romántica", y cainita, por supuesto, que a llevar a cabo su función primordial de informar verazmente. José Morales