Sr. Director: Días atrás se publicó que Pedro Sánchez intenta "promover una escuela pública laica" en la no quepa, en el horario escolar, la asignatura de Religión. A ningún gobierno socialista durante la democracia  se le ocurrió tamaño disparate de impedir que nuestros hijos puedan adquirir cultura religiosa en donde debe recibirse, en la Escuela y en el Instituto. ¿Por qué esa fijación de Sánchez contra la Religión? ¿Será que se ve perdido y quiere  atraerse los votos de la  izquierda radical, o será un intento de cargarse la libertad por odio a la Religión? ¿No sabe, Pedro, que la mayoría, en España, son creyentes y que un 70%  eligen Religión Católica? Pedro, en su casa, podrá disponer lo que quiera; pero imponer, a los padres, sobre la educación religiosa y moral de sus hijos sería un abuso de autoridad, inadmisible en una democracia.  Evoco la carta del político francés y diputado socialista Jean Jaurés (1859-1914), fundador de L'Humanité, a su hijo, que le pidió un justificante para no ir a Religión:  "Este justificante,  querido hijo, no te lo enviaré jamás (...). Tengo empeño decidido en que tu instrucción y tu educación sean completas, y no lo serían sin un estudio serio de la religión (...). La religión es la base de la civilización(...). Es preciso, hijo mío, que un padre diga siempre la verdad a su hijo. Ningún compromiso podría excusarme de esta obligación (L'Humanité)". Josefa Romo