Sr. Director:

En nuestra sociedad quedan muchos signos cristianos, por mucho que se empeñen algunos en suprimirlos. Es un vano intento testimonial de laicismo político-cultural, porque los personajes y las ideologías tienen fecha de caducidad, y no les daría tiempo a eliminar tantos signos, imágenes y edificios cristianos, con más de quince siglos en España.

El término cementerio deriva, según dicen, de koimeterion, dormitorio, pues desde el Evangelio de Jesucristo la muerte ha sido vista como un sueño del que todos despertarán. Jesucristo comparó la muerte al sueño en la hija de Jairo o de su amigo Lázaro, si bien les hizo volver milagrosamente a esta vida terrenal. Sin embargo, también dijo a las hermanas Marta y María aquello de “Yo soy la Resurrección y la Vida; el que cree en mí, aunque hubiera muerto, vivirá, y todo el que vive y cree en mí no morirá para siempre” (Juan 11,25).