Sr. Director: La mentira tiene las patas cortas... aunque en este caso ha ido demasiado lejos. Puigdemont, Junqueras y las CUP han inflado el globo del independentismo ante la pasividad de una sociedad que no ha sabido o no ha podido hacerles frente. Sin embargo, las cosas han cambiado. Tras la consulta ilegal, las manifestaciones violentas y los enfrentamientos en Cataluña, la encuesta que hecha pública en algunos medios  muestra la realidad: seis de cada diez catalanes responden que, también, se sienten españoles y rechazan el ambiente de odio creado por el separatismo, que recuerda a los peores tiempos del País Vasco. Un sondeo que refleja, en buena medida, que la sensatez, el "seny", se abre paso y deja atrás el frentismo. Jesús Domar