Sr. Director: Ahora que asoma el 21-D conviene recordar que el 7-O de 2016 el Ministerio del Interior, todavía con Fernández al mando, tuvo que emitir un comunicado oficial en el que reconocía "errores informáticos" en los censos electorales de las elecciones del 20-D de 2015, la legislatura fallida. En resumen: una parte de la información oficial que se estuvo ofreciendo a través de Internet durante diez meses había sido falsa. El ministro se negó a explicar en qué consistieron los "errores informáticos" y la Junta Electoral Central no se reunió para reclamárselo. ¿Por qué? Ante esa negativa, y dado que el PP contaba con la condena judicial por la 'Operación Mapau', mediante la que transfirió votantes CERA (Censo electoral de los españoles residentes ausentes que viven en el extranjero) controlados desde fuera de España a una circunscripción pequeña para ganar mediante ese fraude un diputado que podía ser decisivo, los que estuvimos trabajando en la investigación y posterior denuncia de las irregularidades seguimos sospechando que para el 20-D podría haberse organizado una maniobra similar en Castilla y León concentrando, a efectos de recuento y en León, los votos CERA que correspondían a las otras provincias. De aquella movida siguen pendientes varias demandas. Entre otras cosas, estamos reclamando al Gobierno que publique en Internet todas y cada una de las actas electorales de todas las urnas que se convoquen, y no solo los acumulados, que es lo que se hace ahora. Comenzando por las del día 21 en Catalunya, se puede encontrar la petición en la asociación Convocatoria Cívica o en Change. No lo hacen porque no quieren, pero publicar todas las actas sería la única manera de cortar de raíz las sospechas de pucherazos y otras irregularidades. Si lo hicieran, cualquier persona podría realizar toda clase de comprobaciones y recuentos. Además, se facilitaría mucho la función de control que, por interés legítimo y en bien de la democracia, tienen los partidos políticos. También se ayudaría a los investigadores sociales en el análisis de la demografía y los resultados electorales. Domingo Sanz