En España tenemos un pequeño problema de falta de disciplina. Ejemplo: se supone que hay una serie de profesiones que no son periodísticas. Ejemplo: jueces, fiscales, policías, etc. Esos profesionales, sometidos a mandato, siempre han actuado siguiendo las normas de obediencia debida. Jamás hacían declaraciones ni hablaban con los medios salvo por el conducto oficial. Pues bien, son las profesiones que más largan y más filtran hoy en día. Hacen política, critican a sus superiores, marcan las pautas a seguir y explican cómo debe comportarse el hombre ético. A lo mejor es que tenemos algún problema serio de disciplina. Van a ser gases… Hispanidad redaccion@hispanidad.com