Un lector de Hispanidad no se cree lo que decíamos en nuestra anterior edición: que la propia Comisión creada por el socialista Rodríguez Zapatero, con la sana intención de cargarse el Valle de los Caídos, considera imposible lo que ahora ha solicitado un juez madrileño: la identificación de cadáveres a petición de familiares muertos durante la guerra civil. Es decir, la misma barbaridad judicial que la progresía aplaude con entusiasmo, después de que un juez, no especialmente versado en la materia, ordenaba que se encontraran a dos hermanos sindicalistas muertos durante la Guerra civil. Pues bien, ni Zapatero llegó a tanto, entre otras cosas porque el asunto tendría un coste absolutamente prohibitivo. Por eso, en el punto 29, página 20, del Informe socialista se desaconseja lo que el juez y la progresía mediática solicitan porque el número de restos enterrados "hace prácticamente imposible la identificación individual". El informe fue dirigido por el entonces ministro de Presidencia socialista, Ramón Jáuregui. Pero su Señoría no ha debido leer el informe. El mester de progresía, tampoco. ¿Por qué no dejamos en paz a los muertos? ¿Por qué nos dejamos en paz los huesos de los muertos para lanzarlos a la cara de los vivos? Que los creyentes recen por ellos y los no creyentes guarden su respetuoso minuto de silencio. Hispanidad.com redaccion@hispanidad.com