No se cansa el diputado de ERC de su teatro ambulante, dentro y fuera del Congreso, para escenificarse con cata de 'tuit'. Gabriel Rufián (en la imagen) es, además de diputado de ERC, todo el teatro que le acompaña allí donde interviene. Este miércoles tocaba el Congreso -por aquello de la sesión de control- y ha aprovechado su duelo con Zoido, ministro del Interior, para más de lo mismo. Primero quería una foto en su escaño exhibiendo las esposas de un preso para escenificar que vivimos en un Estado represor ("esto es su política, esto es su programa electoral", ha dicho a Zoido, esperando que "M. Rajoy" acabe así, esposado. Después ha hilvanado una retahíla de tuits muy en su línea, ha esperado a que el ministro le replicara y antes de que Zoido terminara, ha abandonado el Hemiciclo como un niño chico enfadado con el mundo. Teatro y más teatro, también en el pasillo del Congreso -a continuación, donde le esperaban los periodistas, a los que no ha respondido-, y sin volver la vista atrás -ojo, pero no le seguía ninguna cámara, como posiblemente esperaba- hasta la calle, en la carrera San Jerónimo. Nada nuevo en la escenografía del republicano catalán, que no abandona el Congreso, como ha recordado recientemente su compañero de filas, Joan Tarda (puede verlo en este vídeo), porque a la declaración de la república fantasma, seguirá otra tarea: seguir en la encomienda de que será la misma república la que rescate a los países catalanes, Comunidad Valenciana o Baleares. [video width="640" height="352" mp4="http://www.hispanidad.com/wp-content/uploads/2017/11/tarda.mp4"][/video] Un mundo, en fin, entre la chanza y la comedia bufa. Hispanidad redaccion@hispanidad.com