Media legislatura se ha pasado el ministro de exteriores García Margallo (en la imagen) en su empeño de presidir el Consejo de Seguridad de la ONU. Una vez conseguido, ¿para qué ha servido? Para nada. No ha servido, por ejemplo, para lo que podía haber servido: para poner en cuestión el derecho a la libertad religiosa, hoy pisoteado, tanto en el mundo musulmán como en el hindú. Y con unas normativas en el antaño Occidente cristiano que sólo han servido para que a los cristianos se les asesine en Oriente y se les margine en Occidente. Pero no le pregunten a Mariano por su cobardía: Hispanidad le formuló esa misma pregunta y no le gustó nada. Hispanidad redaccion@hispanidad.com