Es verdad que los planteamientos de la oposición, en particular los del indigente mental Pedro Sánchez, han sido tristes, muy tristes. Si acaso, el PNV, prescindiendo de la boina que no puede dejar de exhibir ha planteado alguna iniciativa, sobre todo en lo que el PNV hace bien: reindustrializar. Ahora bien, también es verdad que Cristóbal Montoro (en la imagen) se empleó bien a la hora de criticar la inanidad de la oposición pero su borrador del Presupuestos Generales del Estado para 2014 tampoco aporta mucho. Es más, se cumplirán los objetivos de déficit por la mínima pero no se reducirá el gasto público ni los impuestos, que constituyen las claves, no ya de la economía española sino de toda la economía europea. El Gobierno insiste en su política de 2012… que ha dado resultado a medidas. Por su parte, la oposición parece carente de ideas y, lo que es peor, de corazón. Hispanidad redaccion@hispanidad.com