En una entrevista a eldiario.es, la ministra de Igualdad nos deja distintas reflexiones de esas a las que últimamente nos tiene acostumbrados. Véase: "El feminismo no es solo representación, sino también redistribución de la riqueza. Por eso la derecha reacciona de esa forma tan salvaje. Solo hace falta ver a los líderes internacionales que tiene y que son hombres multimillonarios".  Como se ha referido la ministra a los hombres de la derecha, en la lista no entraría Emmanuelle Macron, por ejemplo. En su caso es su mujer Brigitte la que ostenta la fortuna que proviene de la prestigiosa marca de repostería Jean Trogneux.  

Pero, volviendo a Irene Montero, sigue la titular de Igualdad respondiendo a distintas cuestiones de profundo calado como la salida de Teresa Rodríguez de Podemos: "Creo que eso tanto Pablo Iglesias como Teresa Rodríguez lo han dejado claro y nos vamos a seguir encontrando en el camino, aunque desde espacios diferentes. Cuando tenemos diferencias lo hablamos y se puede resolver de una forma, si me permites, no solamente más cuidada, sino también más feminista". ¿Querrá esto decir que desde que ha salido Teresa Rodríguez, el partido es más feminista...?

Los pensamientos de Montero abarcan también temas como el de Venezuela: "Siempre hemos defendido que para Venezuela lo que tiene que haber es diálogo y que los venezolanos y las venezolanas sean los que decidan quién es el Gobierno de su país y cómo pueden alcanzar una hoja de ruta que les permita no solamente convivir, sino abordar todos los retos que tengan como país, y que el diálogo es la solución y la única solución posible ha sido una constante para nosotras". A lo mejor, si el pueblo venezolano le hace este planteamiento al dictador Maduro…

La ministra de Igualdad, realista con la correlación de fuerzas de Unidas Podemos en el Gobierno de coalición, explica que el partido nació “para gobernar y ahora estamos gobernando en el primer Gobierno de coalición de nuestra historia, muy orgullosas de haber conseguido en tan poco tiempo y después de tantos procesos dolorosos”. 

Y es que, Montero asegura que hasta llegar al ministerio ha sacado partido de todas sus experiencias laborales. Y de todas ellas ha destacado que la de cajera es quizá la que más le ayuda para desempeñar su cargo actual. "Me ayuda a no olvidar de dónde vengo y la situación de las mujeres a las que represento". Aunque, al parecer, lo único que ha olvidado es ponerlo en su currículum.